¿Qué es Memento Mori?

Memento Mori — (Latín: recuerda que morirás)—es la antigua práctica de reflexión sobre nuestra mortalidad que se remonta a Sócrates, quien dijo que la práctica adecuada de la filosofía es “nada más que morir y estar muerto”.

En sus Meditaciones, esencialmente su propio diario privado,Marco Aurelioescribió que “Podrías dejar la vida ahora mismo. Deja que eso determine lo que haces, dices y piensas”. Ese fue un recordatorio personal para continuar viviendo una vida de virtud AHORA, y no esperar. El pintor francés Philippe de Champaigne expresó un sentimiento similar en su pintura Naturaleza muerta con calavera, que mostraba los tres elementos esenciales de la existencia: el tulipán (vida), la calavera (muerte) y el reloj de arena (tiempo). La pintura original es parte de un género conocido como Vanitas, una forma de arte del siglo XVII que presenta símbolos de mortalidad que fomentan la reflexión sobre el significado y la fugacidad de la vida.

Meditar sobre tu mortalidad solo es deprimente si pierdes el punto. De hecho, es una herramienta para crear prioridad y significado. Es una herramienta que las generaciones han utilizado para crear una perspectiva real y urgencia. Tratar nuestro tiempo como un regalo y no desperdiciarlo en cosas triviales y vanas. La muerte no hace que la vida no tenga sentido sino que tenga un propósito. Y afortunadamente, no tenemos que casi morir para aprovechar esto. Un simple recordatorio puede acercarnos a vivir la vida que queremos. No importa quién seas o cuántas cosas te queden por hacer, un automóvil puede atropellarte en una intersección y clavarte los dientes en el cráneo. Eso es todo. Todo podría haber terminado. Hoy, mañana, algún día pronto.

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El estoico encuentra este pensamiento vigorizante y humillante. No es de extrañar que uno dede Sénecabiografías se titula Morir todos los días. Después de todo, es Séneca quien nos instó a decirnos a nosotros mismos “Puede que no te despiertes mañana”, al acostarte y “Puedes no volver a dormir”, al despertar como recordatorios de nuestra mortalidad. O como otro estoico,epicteto, instó a sus alumnos: “Tened cada día ante los ojos la muerte y el exilio, junto con todo lo que os parezca terrible, así nunca tendréis un pensamiento bajo ni tendréis un deseo excesivo”. Use esos recordatorios y medite en ellos a diario; permita que sean los componentes básicos para vivir su vida al máximo y no perder un segundo.

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